La revuelta de las Cariátides de Petro Márkaris
" La revuelta de las Cariátides" de Petros Márkaris, me tropecé con este libro con la imagen de las Cariátides, nada más llegar de nuestro viaje a Grecia. Me atrae enormemente leer historias que suceden en los lugares a los que he viajado o voy a conocer. Sin dudarlo puse esta lectura arriba de la larga fila de mis libros pendientes.
Leí mientras acababa el libro que tenía entre manos que Petros Márkaris es un escritor de 87 años con una larga trayectoria como activista social.
No pude resistirme, por lo tanto, a esta historia, encuadrada como novela negra donde se describía la llegada de una mujer a un puesto de importancia dentro de los cuerpos de seguridad y donde se entre asesinato y asesinato se explicaba la revuelta de un grupo de mujeres llamada Cariátides, luchando contra el abuso del capital extranjero que intentaba introducirse en Grecia.
Con ese anticipo de temas, esta novela tenía todos los ingredientes para una suculenta lectura post viaje a Grecia. Toda esta argumentación para demostrar lo difícil que es para mí decir que un libro no me ha gustado. La historia escrita como si fuese un diario personal, al detalle de todo lo que hace el personaje y lejos del suspense o la intriga que debe tener toda novela de este tipo. Bastante plana en general. He de reconocer que he leído hasta el final “La revuelta…” aunque no por interés en la lectura, sino por la posibilidad de reconocer y rememorar los lugares, las calles y algún rincón de la ciudad de Atenas por la que hacía pocos días había paseado este mes de abril.
Petros Márkaris tiene una larga serie de novelas dedicadas al protagonista de este libro, un policía ateniense llamado Kostas Jaristos. Desconozco las anteriores, pero en este opino que ha desaprovechado la oportunidad que le daban los temas tratados para escribir una buena historia. A pesar de ser un reconocido escritor que ha utilizado sus libros para hacer una valiosa denuncia social.
Un escritor que en el 2012 recibió VII Premi Pepe Carvalho como uno de los grandes escritores mediterráneos de novela negra. Siendo comparado su personaje Kostas Jaristos al creado por Manuel Vázquez Montalbán.
https://www.ara.cat/cultura/pepe-carvalho-petro-markaris-manuel-vazquez-montalban_1_2554560.html
Un escritor con un posicionamiento social muy interesante con el que es fácil estar de acuerdo. https://quelibroleo.com/noticias/autores/petros-markaris-recibe-hoy-el-premio-pepe-carvalho-de-novela/
Hola, Angels:
ResponderEliminarOtra coincidencia contigo, aunque creo que es común a los amantes de la lectura, es la de procurar leer algo que tenga que ver con el lugar que voy a visitar, estoy visitando o, como esta vez en tu caso, acabo de visitar. Qué placer ver a los personajes de ficción correteando por esas calles y plazas que tú y tus acompañantes os sentasteis a comer, a tomar un café o a disfrutar contemplando sus edificios y la historia que esconden. Sí, eso me encanta.
De Petros Markaris sólo he leído una novela, "Noticias de la noche", precisamente la primera de la serie de Kostas Jaristos. Fue hace casi diez años y no la recuerdo mucho, pero como hice reseña de ella puedo decirte que me gustó y que llegué hasta ella y su autor por la situación política que en 2015 vivía Grecia. Markaris denuncia en ella la desigualdad social y la fuerte xenofobia de los griegos que él mismo, de origen armenio, ha vivido y sufrido. Me dije (lo acabo de leer en mi reseña) que volvería a Markaris y ¡han pasado ya nueve años sin hacerlo! Desde luego a los amigos de los libros no se nos puede hacer ningún caso (ja, ja...).
Besos
Hola Juan Carlos:
EliminarGracias por dejar tu comentario. Saber que hay alguien detrás que te lee hace mucha ilusión. Como dices yo también agradezco a mi blog que me ayude a recordar lo leído. Da una rabia tremenda saber que has tenido un libro entre las manos y no recordar detalles que te hicieron vibrar. Con suerte dejan, y gracias, la sensación agradable de una buena lectura o una gran lectura y digo esto porque si lo que leo no me produce placer lo abandono antes de llegar al final.
Un abrazo